YAACOV LUCHA CONTRA UN ÁNGEL

Parashá VAYISHLAJ

El patriarca se había ausentado del hogar de sus padres porque temía la justificada ira de su hermano Esav. ¿Acaso no había obtenido ilícitamente la bendición patriarcal en detrimento de su hermano? Sus padres le advirtieron de la posible venganza fraternal y Yaacov encontró refugio en el hogar de su tío Laván, donde contrajo matrimonio con sus dos hijas. Incluyendo las concubinas que le fueron adjudicadas, Yaacov se convirtió en el progenitor de doce hijos quienes, a su vez, engendraron las doce tribus de Israel.

Después de veinte años de ausencia del hogar paterno, llegó el momento del retorno. En los últimos días, Yaacov había concluido que la influencia de Laván lo había contagiado y que había llegado la hora de enfrentar la realidad: la ira de su hermano. Pero esta vez venía acompañado por doce varones, una multitud de sirvientes y miles de cabezas de animales que conformaban su rebaño. Los exploradores que envió informaron que Esav venía al encuentro con cuatrocientos hombres, número que auguraba una confrontación bélica. Yaacov tenía que prepararse.

La noche antes del encuentro salió solo, posiblemente para meditar acerca del posible desenlace del próximo día.

Topó con un ish, un enigmático ser humano o ángel contra quien tuvo que luchar hasta el amanecer. ¿Quién era esa figura emblemática? Era un hombre, un ser diabólico o un ángel. Si era efectivamente un ángel, ¿cuál había sido su misión? Hay quienes opinan que se trató del ángel protector de Esav que venía a herir a Yaacov para debilitarlo antes del encuentro del día siguiente entre los hermanos. Otros opinan que era el ángel protector de Yaacov, cuya misión era entrenarlo y enseñarle cómo sobreponerse a Esav.

Rambam opina que este episodio ocurrió en el cerebro de Yaacov. Se trató de un sueño. Tal como el burro de Bileam que, años más tarde, hablaría solamente en la mente del profeta. Una especie de fantasía que tenía una característica profética. De acuerdo con Rambam, el texto bíblico se refiere, tal vez, a la lucha que Yaacov tuvo que hacer contra sí mismo. El sueño había tenido una fuerza real porque le había producido una herida en el muslo.

Rabí Yosef Karo considera que las experiencias de los patriarcas son un augurio para el futuro de la nación hebrea.

El viaje de Abraham a Egipto en respuesta a la hambruna de Canaán vaticina el exilio de su descendencia en la esclavitud egipcia. Los acontecimientos que acompañaron la vida de Yitsjak corresponden al exilio en Babilonia y Yaacov ejemplifica el exilio milenario del pueblo hebreo. Ahora, Esav exige la devolución de la bendición paterna y los derechos del primogénito que Yaacov arrebató. Esav sabe que no tiene méritos para ello y envía a su ángel protector para que luche contra Yaacov. Yaacov sale vencedor del encuentro y el ángel lo bendice y de esa manera confirma a quien pertenece la bendición que el anciano Yitsjak había dispensado.

El caso de la primogenitura es diferente: Karo opina que la herida que Yaacov recibe en el muslo es una señal que este asunto no ha sido resuelto. Con los regalos que Yaacov ofrece a Esav en este anticipado encuentro, se cumple el pago completo por la primogenitura, ya que Esav sabe que no posee la integridad moral para asumir la conducción religiosa de la familia, función primordial de la primogenitura.

La cojera de Yaacov se cura después de que Esav acepta los regalos de su hermano.

Shaul Regev cita a Rabí Eliécer Ashkenazi, quien opina que la primogenitura fue adquirida legalmente por Yaacov.

Incluso recibió un documento firmado por Esav que, tal como era la costumbre, ató a su cintura y por ello el ángel lo atacó allí. La idea es que Yaacov no adquirió ese derecho a través de una estratagema, conducta que se deriva de la etimología de su nombre, Yaacov. Por ello, el ángel le cambió el nombre de Esav por Israel, cuyo significado es serará, autoridad.

Abarbanel, que se apunta a la interpretación de Rambam que todo había sucedido en el transcurso de un estupor profético, diferencia entre “sueño” y “visión”. En el caso de una “visión profética”, los hechos adquieren una realidad tangible, como en el caso de los tres personajes que se presentaron ante el convaleciente Abraham después de la cir cuncisión.

Para Abarbanel, no era solamente una persona que deseaba eliminar a Yaacov; el ángel representó a una nación y, por ello, la lucha contra Israel no terminó con ese episodio. El pueblo judío no será derrotado, pero será herido.

Mientras Israel resida en el territorio de Esav, mientras se encuentre en el exilio, tendrá que sufrir heridas. Pero cuando llegue la redención final, los otros pueblos tendrán que ofrecerle una bendición y, de esta manera, confirmarán la autenticidad y legitimidad de la bendición original que Yaacov recibió del anciano Yitsjak.

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One thought on “YAACOV LUCHA CONTRA UN ÁNGEL

  1. Incluso recibió un documento firmado por Esav que, tal como era la costumbre, ató a su cintura y por ello el ángel lo atacó allí. La idea es que Yaacov no adquirió ese derecho a través de una estratagema, conducta que se deriva de la etimología de su nombre, Yaacov. Por ello, el ángel le cambió el nombre de Esav por Israel, cuyo significado es serará, autoridad.

    Le hago con todo respeto y amor una corrección donde dice en este párrafo: Por ello, el ángel le cambió el nombre de Esav por Israel,
    Es: Por ello, el ángel le cambió el nombre de Yaacov por Israel,

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