Conquista tu futuro.

La matriarca Sara muere, ¿Por qué murió? Puede ser porque no escuchó bien, creía que su hijo Isaac había muerto sobre un altar y no había escuchado de que en realidad esto nunca ocurrió, a ultimo momento se salvó. 

Sea como sea, los sabios consideran que había llegado el momento de su fallecimiento y eso solo fue el evento que ocasionó que falleciera, pero había vivido su vida. Abraham busca ahora un lugar para enterrar a su esposa.

Él es un extranjero, es un “Guer” en esa tierra, y escucha que un señor que se llama Efrom, tiene un lugar que se llama Mearat Hamajpelá. Majpelá viene de la palabra Kaful, que quiere decir doble, allí hay parejas enterradas: Adán y Eva supuestamente están enterrados allí al igual que los tres patriarcas con sus esposas estarán enterrados allí también. Abraham quiere adquirir ese terreno y le pide a Efrom que desea enterrar a su esposa. Efrom responde: no hay problema, la tierra es tuya, has lo que quieras con ella. Pero Abraham insiste, quiere pagar por el terreno y efectivamente paga un precio, una suma exorbitante , moneda cantante y sonante. Según la Torá, porqué insiste Abraham en pagar por esas tierras, acaso no recordaba que Dios le había prometido que esa tierra sería suya. Dios le dice que caminara la tierra a lo ancho y a lo largo, de Norte a Sur, Este a Oeste, todo eso sería suyo y de sus descendientes.

Por qué tenía que pagar ahora para adquirir un terreno, Dios le había dicho que eso iba a suceder después de 400 años: durante 210 de esos 400 años sus descendientes serian esclavizados en Egipto, luego pasarían 40 años por el desierto, luego tendrían que conquistar la tierra y desde ese momento, 400 años adelante, la tierra seria suya. Porqué tiene que pagar por ella? Puede ser que Abraham quería participar, no quería tan solo recibir de Dios, también quería hacer algo, quería ser partícipe en adquirir la tierra ancestral.

Ustedes saben que en Noviembre de 1947, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió la partición de Israel en dos: una parte sería un estado judío, que luego se iba a llamar Israel, y la otra seria para un estado árabe. Pero eso ocurrió después que los Jalutsim, los Pioneros, hayan dado su vida por erradicar el paludismo, por secar todos los pantanos que existían en Israel. Por crear ciudades nuevas, por poblar nuevamente la tierra de Israel.

Sucedió después de un gran esfuerzo del pueblo judío y lo que Abraham nos estaba enseñando es, lo importante no es tan solo lo que recibes desde afuera, tú tienes que hacer algo por ti. Y tenemos que hacer algo también por nuestros hijos, todos sabemos que la educación en el fondo depende de uno, del esfuerzo que uno haga, pero uno tiene que ayudar a sus hijos, uno tiene que ser partícipe con ellos también. Aunque Dios le haya prometido a Abraham darle esa tierra en herencia permanente, Abraham, personalmente, también quería participar de ello.

Vemos como nuestros hermanos en Israel están cumpliendo con esa promesa, por un lugar está la promesa divina de darnos la tierra ancestral, y por otro lado el esfuerzo de nuestros hermanos en Medinat Israel para hacerla florecer, por crear una sociedad que es envidiable. Por haber creado un estado único en el mundo, el cual después de seis décadas y media de existencia, se ha convertido en una de las potencias tecnológicas más importantes del mundo. Para nosotros, Israel se ha convertido en un gran centro de estudio de la tradición judía y es ese hecho lo que tiene un valor permanente.

Matrimonio Duradero

¿Cual es el origen bíblico de la noción de matrimonio? Dice la Torá “Ki yikaj ish ishá”, cuando un hombre adquiere una mujer, esa es la palabra que utiliza la Torá. “Ki yikaj ish”, dice el Talmud, ¿Cómo se obtiene eso? ¿Qué se hace para adquirir una esposa?, El ejemplo que trae es sumamente raro. Dice que cuando Abraham tenía que adquirir un terreno para enterrar a su esposa Sará, fue donde Efrón y allí también se menciona la palabra, “lakájat”, tomar, adquirir. Y tal como en ese caso, tuvo que darle unas monedas para adquirir el terreno, así también cuando un hombre se casa, le da un objeto de cierto valor a la mujer. Puede ser una moneda o puede ser algo que equivale al valor de esa moneda. Hoy en día, y ya por muchos siglos se consagra el matrimonio con un anillo que el hombre le da a la mujer. y esa es una manera de adquirir una esposa, de conformar un hogar. Claro quisiera pensar un momento, qué raro, se aprende como se produce el matrimonio con el anillo, con el objeto que se le da a una mujer, eso se deduce de un entierro, de la sepultura.

Interesante también, que antes de la muerte de Sará, no hay mención de entierro en la Torá. Cuando fallece Abel por ejemplo, Hével, el hijo de la primera pareja, no se habla de enterrarlo ni nada por el estilo. De acuerdo al Midrash, Adán y Eva si lo enterraron. ¿Cómo aprendieron qué es lo que se debe hacer? Observaron como un pajarito estaba enterrando a otro pajarito que había muerto, y así aprendieron qué se debe hacer con un difunto.

A lo mejor lo que se nos quiere enseñar es que al enterrar una persona cuando fallece, lo que estás haciendo realmente es devolviendo a la persona al elemento del cual proviene: la tierra. Porque Dios creó al primer hombre de la tierra, del polvo, vemos entonces que el polvo regresa nuevamente al polvo. Al mismo tiempo nos está diciendo, de que esto es algo duradero, permanente.

La idea de devolver también se hace presente cuando una pareja se casa. Porque de cierta manera se está devolviendo. ¿Devolviendo qué? Según la Torá, la primera mujer fue creada de “Tsela”, que muchos dicen es una vértebra, pero de acuerdo al comentarista Rashí no es una vértebra. “Tsela” se refiere a una sección del primer hombre, quien fue dividido en dos. Una mitad fue hombre y la otra mitad fue mujer.

Al casarse entonces, lo que se está haciendo es uniendo, devolviendo. Uniendo nuevamente las dos mitades en una sola. El matrimonio por lo tanto no debe ser un evento secuencial: primer matrimonio, segundo matrimonio, como suele ser en nuestros días cuando la mitad de las personas en los países de avanzada se divorcian. ¿Quién sabe cuál es la tasa actual de divorcios en este momento.

En la Torá el matrimonio es en realidad la devolución al origen anterior, primario, y por lo tanto debe ser permanente, ¿Por qué se entierra a la persona? Puede ser porque se piensa que con la muerte no termina todo. Guardas los restos del fallecido porque piensas que hay una vida en el más allá, hay una vida espiritual posterior. O sea que el matrimonio no termina con la muerte de uno de los conyugues según esa concepción, sino que continua el recuerdo de la vida matrimonial mientras una de las partes de la pareja continua, los hijos continúan recordando el matrimonio de sus padres.

O sea que el matrimonio no es algo pasajero, como lamentablemente se ha convertido en nuestra sociedad. Más bien es algo que debe tener fortaleza, debe durar, es algo que debe tener permanencia en nuestra sociedad, ¿Cuáles son las sociedades que progresan mejor? Las que saben lo que es la familia, lo que es la unidad matrimonial, donde hay padres, hijos, donde hay una relación muy bien definida. Las sociedades donde hay relaciones secuenciales, son las sociedades que menos progresan en este mundo. Asegúrate entonces de que tu matrimonio, el matrimonio de tus padres y el de tus hijos sea duradero, porque el progreso de la sociedad es una consecuencia de la salud y bienestar de ese matrimonio.

Estudio de la Torá. ¿Porqué repetimos lo mismo año tras año?

Unas de las aspectos básicas que caracteriza al judío es el estudio de la Torah. Hay quienes creen que bienes materiales son los que más nos interesan, y no los desperdiciamos, apreciamos eso también. Pero lo más importante es el estudio. Las experiencias en la vida son lo más importante y no las cosas materiales, eso nos caracteriza desde el momento en que Dios reveló Su Voluntad en el monte Sinaí a Moisés y luego trasmitido al pueblo judío. Todo lo escrito en la Torah, dictado directamente por Dios a Moisés. Estudiamos la Torá todos los días, día y noche, hay una obligación de estudiar la Torah. En realidad en la misma Torá encontramos algo diferente “Veshinantam levaneja” “Y enseñaras a tus hijos”, claro está, si tú quieres enseñarle algo a alguien tienes que saberlo primero.

Sin embargo, hay un versículo que se cita muchas veces sobre el estudio de la Torá que reza así “Vehaguita bo yomam valaila”, “Te concentrarás, pensarás, estarás consciente a todo momento de la palabra de Dios día y noche”.

¿Dónde está escrito ese versículo? No está en la Torá, está en el libro de Josué que sigue a la Torá. Mi maestro, el Gaón Harav Josef Soloveitchik en una oportunidad dijo lo siguiente: ¿Saben por qué no está en la Torá? Porque mientras Moisés vivía, cualquier persona que tenía un problema o no entendía algo, siempre podía acudir a Moisés y él le diría cuál es la solución al enigma. Pero una vez que Moisés falleció, nos dimos cuenta de que ya no teníamos más ese marco de referencia, cada uno de nosotros tenía que estudiar.

Cada generación está más conscientes de la obligación de estudiar. Debemos pensar acerca del hecho que el estudio transforma a la persona.

Uno es diferente antes del estudio y después del estudio. Se lee la Torá en la sinagoga anualmente, se termina el ciclo empezando en Simjat Torá y se termina en Simjat Torá del año siguiente, desde Bereshit (Génesis) hasta el final.

¿Qué sentido tiene leer el mismo libro año tras año. Bueno, si se considera que la Torá contiene sabiduría infinita, la sabiduría de Dios, uno nunca termina de entenderla y cada vez que uno la lee, uno la estudia, uno entiende algo nuevo. Pero algo también muy importante, es que cualquier lectura, cualquier estudio, es el intercambio entre dos, la fuente y la persona que está estudiando. La Torá no cambia pero la persona va cambiando y cada año adquirimos nuevas experiencias y cuando leemos los mismos capítulos de la Torá al año siguiente, estamos leyendo como un ser diferente debido a las experiencias que tuvimos ese año. A fin de cuenta creo que más que una obligación, el estudio de la Torá es más bien un privilegio porque con el estudio tú creces como ser humano, como judío, como padre, como hermano, como ser humano para el resto de tu vida.

El poder transformador de Yom Kipur

En varios eventos de la Biblia, ésta utiliza una expresión, Beétsem hayom hazé, “en ese mismo día” ocurrió eso, para destacar ese día, algo especial era ese día. Por ejemplo, el diluvio, el Mabul que ocurrió, la Torá menciona “en ese mismo día” ocurrió el diluvio. Cuando nuestros antepasados salieron de Egipto, la Torá también utiliza la misma expresión, Beétsem hayom hazé, “en ese mismo día” salieron de Egipto.

El día cuando Abraham se circuncidó, también se refiere Beétsem hayom hazé, en ese día Abraham se circuncidó. También circuncidó a su hijo, también circuncidó a todos los varones que estaban junto a Abraham.

Cuando fallece Moisés, a los 120 años la Torá también utiliza Beétsem hayom hazé, “en ese mismo día” ocurrió tal y tal cosa.

Finalmente en el día de Yom Kipur también contiene esa frase, Beétsem hayom hazé, “en ese mismo día”.

¿Por qué utiliza la Torá esa expresión, “en ese mismo día”?

Para destacar la importancia de ese día, es un día excepcional. ¿Porqué esos días son excepcionales?

En realidad son días que transformaron la historia de cierta manera. El diluvio enseñó que no tan solo los seres humanos podemos desviarnos, los animales también. Ocurrió una desviación total que puede ocasionar la destrucción total de la naturaleza. Todos los seres perecieron y había que empezar el mundo de nuevo. Eso nos tiene que concientizar, de que nuestras acciones tienen repercusiones en este mundo.

Es un día especial para nosotros, saber que con nuestras acciones nosotros podemos construir un mundo, pero que también podemos destruir un mundo.

El día del éxodo de Egipto fue también transformativo, porque transformó a un grupo de esclavos y los convirtió en una nación. Produjo un grito de libertad que se escucha hasta el día de hoy en todo el mundo. Fue el ejemplo: naciste esclavo pero no tienes que permanecer esclavo. Naciste dentro de cierta capa social, pero no tienes que permanecer necesariamente allí. Puedes escalar, adquiriste cierto conocimiento pero puedes adquirir mucho más, tienes destreza en el piano, pero puedes tener mucho más.

Lo que enseñó Yetsiat Mitsráyim es que la condición humana no tiene que ser permanente, el ser humano puede crecer, puede transformarse.

Desde luego que la muerte de Moisés fue un día transformativo también, porque la vida de Moisés transformó al mundo. Enseñó a todo el mundo a través de los Diez Mandamientos, la conexión que hay entre Dios y este mundo, que nuestro comportamiento moral, nuestro comportamiento ético, el cumplimiento de las mitsvot, transforma a la persona y transforma a la sociedad también.

¿Por qué es importante el día de Yom Kipur? Porque si es que después de la experiencia de 24 horas de rezo, de ayuno, de acercarse a Dios, de introspección, de escucharte a ti mismo, de descubrir cuáles son tus talentos, cuáles son tus fallas, y de hacer un esfuerzo por mejorar, si es que ese día no es transformativo de tu persona, entonces no se a logrado la misión.

Tiene que ser Beétsem hayom hazé, “en ese mismo día” tiene que ocurrir algo importante en tu vida, tal como el éxodo de Egipto, tal como el diluvio, tal como la muerte de Moisés. La enseñanza de Moisés, incluso el día de la circuncisión de Abraham fue Beétsem hayom hazé, porque demostró que sin sacrificio no se puede vivir en este mundo, tú tienes que ofrecer algo de ti mismo.

Así que espero de que en este día de Yom Kipur, tal como el próximo día de Yom Kipur tienen que ser un día transformativo en tú persona. Que hayas sido una persona antes de Yom Kipur y otra después de Yom Kipur.

Realmente vas a ser otro, en el sentido de que has crecido, que has mejorado, te has superado. Recuerda que todo depende de ti, tú tienes que tomar la iniciativa. Shuva Israel ad HaShem Elokeja, tú tienes que retornar hasta Dios. Moshjeni, ajareja narutsa, Dios te da un jalón, pero luego ajareja narutsa, tú tienes que ir corriendo tras ello.

Estoy seguro que con tus sinceras plegarias, no solo vas a tener la inscripción en Rosh HaShaná, tendrás ahora también el sello de Yom Kipur, para una vida de bienestar, de salud, de amor, de tranquilidad, de entendimiento en el seno de tu familia, en el seno de todo el pueblo judío, en el seno de toda la humanidad.

Mensaje para el año nuevo – ¿Observante por amor o por temor?

Estamos próximos a celebrar la festividad del Rosh HaShaná, el comienzo del año nuevo judío 5775. La biblia dice, la Torá dice que en el séptimo mes del año, el primer día del mes, eso se refiere al mes de Tishrei, porque los meses en la Torá se cuentan empezando con Nisán, que es el mes en el cual el pueblo judío salió de Egipto.

En ese día, el primer día, tiene que ser un día Yom Teruá, un día en el cual se escuche el sonido del Shofar y la Torá es parca, no dice que realmente es este año nuevo, porqué se toca el Shofar?

Miamónides, Ranbam, dice de que el Shofar es realmente un sonido de alerta, dice: despierten de la somnolencia de todo el año, has un examen de tu vida, hacia dónde te diriges, cuáles son tus errores para que te arrepientas de ellos en esos próximos días los Aséret Yemei Teshuvá y vuelvas desde a tus raíces.

Pero hay quienes dicen: que es la coronación de Dios como rey del universo. ¿Dios necesita ser coronado? Los seres humanos somos los únicos que reconocemos realmente a Dios como el creador del universo, hay dos sonidos del Shofar a los cuales quisiera hacer referencia, uno es Teruá, como dice Yom Teruá, que consiste de por lo menos unos nueve sonidos quebrados, pequeños, uno tras del otro. Y para qué se usaba esa Teruá, era un sonido de alarma como por ejemplo en caso de algún peligro, en caso de guerra se hacía sonar el Shofar para reunir a la gente.

Eso nos hace recordar que el peligro, la amenaza, realmente une a la gente, cuando hay un problema de una enfermedad que nadie puede explicar la gente se une, cuando hay una amenaza de una invasión de otro país seguramente que une a la gente.

Pero desde el punto de vista religioso uno puede decir que la Teruá hace referencia a las prohibiciones, a las cosas negativas, a lo que no se puede hacer, por ejemplo en Shabat no se puede prender la luz, no se puede utilizar ningún instrumento electrónico, no se puede hacer ningún tipo de trabajo.

Por otro lado está el sonido de Tekiá, que es un sonido largo sostenido y ese sonido se utilizaba para convocar una asamblea, para que la gente venga a tratar un problema que todos tenían que discutir. A lo mejor el sonido de Tekiá se refiere a las cosas positivas que hay en los mandamientos como por ejemplo durante el Shabat debes estar reunido con tu familia, estudias la Torá, haces cosas positivas.

Una cosa son las prohibiciones y otras son las cosas positivas. Hay gente que cumple con la religión por temor, le tiene miedo a Dios, no vaya a recibir un castigo.

¿Cuál es el tipo de judaísmo que deberíamos de practicar?.

¿Es por temor al castigo o porque realmente tenemos deleite, buen sabor, porque entendemos cuál es el sentido de las cosas?

Quien tiene su familia alrededor en la mesa de Shabat, puede apreciarla mucho desde luego, y puede apreciar las cosas positivas en la tradición judía, quien estudia la Torá a profundidad y de repente descubre algo que no había entendido antes se convierte en un deleite extraordinario. ¿Cómo conectamos esto a los sonidos del Shofar?

¿Cuál Shofar deberíamos escuchar en Rosh HaShaná? Por un lado está la coronación de Dios como rey, pero Su Voluntad incluye la parte negativa y la parte positiva. ¿A cuál deberíamos prestar atención?

A lo mejor lo que el Shofar nos está diciendo: la vida consiste de Teruá, consiste de temores y de peligros pero también consiste de Tekiá, de satisfacciones, de unirse el uno con el otro, de sentir el calor humano del uno con el otro.

La vida no se puede dividir en pequeños espacios, la vida es sumamente compleja, porque el ser humano es sumamente complejo. Hay quienes, repito, observan la religión por temor a Dios y otros por el deleite que sienten en ella, a lo mejor lo que necesitamos es en realidad una combinación de ambos, pero yo creo que el acento a la larga debe de producirse en las cosas positivas, en sentir el calor de la familia, en sentir la santidad del día Shabat.

Hay veces que sentimos la santidad por el lugar, por una persona, por un momento, por un día, ¿quién de nosotros al salir de la sinagoga en Rosha HaShaná no se siente mejor, por haber participado en los rezos, por haber escuchado el sonido del Shofar.

Este es el momento para desearles a cada uno de ustedes Shaná Tová, que tengan un buen año, un año de salud y de bienestar, con mucha dicha de todos los suyos, con mucha dicha de sus amistades, de su comunidad y si es que hay cosas negativas, si hay peligro alrededor hay que tomarlo en cuenta, pero a fin de cuenta son las cosas positivas las que van a regir, van a señalarnos un rumbo en la vida por el cual seguir. Shaná Tová.